Multas y suspicacias en torno de un operativo fiscal bonaerense que detectó un megaedificio declarado como baldío que se había inaugurado en 2022
¿Puede un edificio enorme, de 25.000 metros cuadrados cubiertos, muy destacado, visible desde el “corredor Bancalari” del partido de Tigre, en la zona norte del Gran Buenos Aires, escapársele al fisco bonaerense?
Según la Agencia Recaudadora de la Provincia de Buenos Aires (ARBA), fue lo que pasó durante más de un año largo, porque recién el pasado miércoles 7 de febrero el organismo “detectó” Officia Nordelta, un edificio inaugurado en 2022, que se desarrolló a lo largo de al menos 5 años -desde la compra del predio por parte de Pedro Podestá SA, a Nordelta SA- y que según la propia ARBA figuraba como “baldío”.
Tras el operativo, la agencia fiscal emitió un comunicado, que dice: “los equipos de fiscalización llevaron a cabo un operativo integral en Nordelta, partido de Tigre, en el que detectaron un complejo de oficinas de lujo de 14.500 metros cuadrados construidos que pagaba el Impuesto Inmobiliario como si fuese un terreno baldío”.
“Si bien el edificio fue construido hace más de un año -proseguía ARBA- todavía no tenía registrado ni un solo m2 en el catastro provincial. Tiene 5 pisos edificados y cuenta con cocheras subterráneas”.
A pedir de Kicillof
Por la red X, Cristian Girard, titular de ARBA, reiteró parte del comunicado sobre el operativo y agregó: “Desde que asumimos en 2019, y por pedido del gobernador @kicillofok, le mostramos a la sociedad que hay una Agencia moderna, que simplifica y que aliviana el cumplimiento a la gran mayoría pero que cae con toda la fuerza sobre aquellos que no cumplen teniendo capacidad contributiva para hacerlo”.
Aparte de Officia Nordelta, dijo ARBA, “la fiscalización en Nordelta permitió encontrar irregularidades en otras partidas inmobiliarias, incluyendo más de 100 casas y 81 piletas. Sumando el edificio y el resto de las construcciones sin declarar, la Agencia detectó 45.000 m2 no registrados. Los responsables fueron intimados y ahora deberán afrontar multas de hasta $25 millones”.
El posteo de Girard despertó reacciones suspicaces. “Cristian, le hubieran preguntado a Zamora, que lo inauguró en 2021″, notó un usuario, y adjuntó un video de la visita del entonces y actual intendente de Tigre, Julio Zamora, en octubre de ese año, en el que se enorgullece del edificio de oficinas de 25.000 m2 “de los que más de 12.000 m2″ son comercializables. Prueba -dice- de que “Tigre sigue creciendo”. Su esposa, la concejala Gisela Zamora, elogia la obra, entre otras cosas por sus paneles solares que la vuelven un “paradigma nuevo” de sustentabilidad.
“¿Nunca pidieron permiso para hacer la obra? Vos cambiás los azulejos del baño y te caen 14 inspecciones”, observó con sarcasmo “Mr Crowley”. Un activista en redes, @BetoMendeleiev, observó a Girard: “Vos me vas a decir que nunca vieron que se construyeron 14.500 m2? No es una choza. O son muy inútiles o alguien se olvidó de pagar la coima para seguir figurando como baldío”.
“¿Fue difícil encontrar un mega edificio en la ENTRADA PRINCIPAL de Nordelta? planteó otra cuenta. “Yo si hubiese estado 4 años sin encontrar un edificio, no haría tannnnta alaraca” (sic).
“Encontraron embarcaciones con deudas; pero no encuentran los autos de funcionarios que deben millones en multas”, observó una más. Otra, de simpatías mileístas, hizo una lectura política: “Es la primera noticia que escucho de uds jajajaja, 4 años sin hacer una mierda y ahora, Oh casualidad que les cortaron el chorro tienen que salir a recaudar. Aplausos para @JMilei!”.
Qué dicen las partes
Desde la empresa desarrolladora y dueña de Officia, Pedro Podestá SA, dijeron a Infobae que el desarrollador “no está posibilitado de declarar el inmueble, porque la parcela aún se encuentra a nombre del anterior propietario, Nordelta SA; los papeles para la subdivisión se presentaron hace varios años ante Catastro y no ha se ha dado por finalizado el trámite”. Se trata de problemas burocráticos, alegaron. “Ante la notificación se buscará la forma de solucionar el tema, realizando una presentación provisoria a nombre de Nordelta SA”.
Desde Nordelta, en tanto, señalaron que la empresa vendió el “macro-lote” hace 5 años, y que el desarrollador hizo el trámite municipal de “particularizado”, que suele demorarse.
Ante estas observaciones, desde ARBA respondieron que, más allá de esas demoras, “la obligación de declarar el inmueble está muy clara en la normativa y tiene que ver con las condiciones de habitabilidad, independientemente de la subdivisión y la titularidad. El responsable tiene que hacerlo a través de un profesional, y se puede hacer a través de la página web de ARBA”.
Según la Agencia, los 14.500 m2 “habitables” tendrían que haber sido declarados en noviembre de 2022, hace más de un año. Además, añadieron, hay otros 8.500 m2 que están en un 95% de su culminación, “pero como todavía no tienen sanitarios, el titular no está obligado a declararlos”.
“La obligación de declarar el inmueble está muy clara en la normativa y tiene que ver con las condiciones de habitabilidad, independientemente de la subdivisión y la titularidad”, dijeron desde ARBA
Agregando las otras “detecciones” de metros cuadrados construidos en Nordelta, el comunicado de ARBA refirió un total de 45.000 m2 que no estaban registrados y dan lugar a multas “de hasta $25 millones”, a un promedio de $525 el metro cuadrado.
¿Es correcta esa cifra?, preguntó Infobae. “Es nada más que la multa, que se termina de graduar una vez que presentan el descargo los desarrolladores. La multa solo pena la omisión de la Declaración Jurada, no tiene relación con la cantidad de m2 detectados”, dijeron desde Arba. Y aclararon que a partir de la incorporación al catastro provincial, sí aumentará el impuesto sobre los m2 antes declarados como baldío, que empezarán a pagar como edificados.
En julio de 2021, hace 30 meses, Infobae había informado sobre la obra, con una inversión calculada en USD 40 millones y un avance, entonces estimado en el 85%, que ya incluía trabajos de parquización de 15.000 metros cuadrados. Se trata, decía la nota, “del primer edificio de oficinas AAA apoyado en el concepto Campus, ubicado en el corazón de una de las zonas más dinámicas de los últimos tiempos. El emprendimiento posibilita trabajar cerca de casa, en un entorno natural, junto al agua y muy buenas vistas (…) cerca del área de ingreso a Nordelta en el acceso Benavídez-Bancalari”.
En el mismo operativo en que se “detectó” el edificio de 25.000 m2 cubiertos, los equipos de fiscalización de ARBA retuvieron 2 yates de lujo, cuyos propietarios adeudaban en conjunto más de $1,5 millones del Impuesto a las Embarcaciones Deportivas. Los yates fueron “retenidos” por 36 horas, plazo que tenían los dueños para pagar la multa e impedir el “secuestro definitivo” y denuncia ante la Justicia y Prefectura. En ambos casos, dijeron desde la agencia, los dueños abonaron la deuda fiscal antes de las 36 horas.
En la redada también hubo controles sobre vehículos de alta gama, por Impuesto a los Automotores y otros tributos. Según la agencia bonaerense, 104 estaban radicados en la provincia y un 21% registraba deudas en concepto de patente, “por lo que sus titulares firmaron compromisos de pago o abonaron de manera electrónica un total de $3,2 millones”.