Inteligencia artificial redefine las relaciones sexuales humanas: el cuerpo no lo es todo
Con el progreso actual de la tecnología, no es descabellado pensar que los robots y la realidad aumentada podrían cambiar radicalmente las experiencias sexuales en el futuro. Al menos, esa es la opinión de Mo Gawdat, quien fue director comercial en Google X.
Afirmó que la realidad virtual y aumentada pronto harán posible que las personas experimenten simulaciones sexuales que serán indistinguibles de la realidad.
Durante el podcast ‘Impact Theory’ de Tom Bilyeu, Gawdat dijo “el sexo ocurre en el cerebro, al final del día. La parte física no es tan difícil de simular”.
Neuralink de Elon Musk tendría mucho que ver
El también autor de varios libros relacionados con crecimiento personal mencionó a Neuralink, el desarrollo biotecnológico de Elon Musk, el cual consiste en conectar cerebros humanos a computadores con el objetivo de tratar afecciones neurológicas.
Innovaciones como Neuralink, que conectan la tecnología directamente con el sistema nervioso, podrían hacer innecesario tener parejas humanas. Gawdat reflexionó que si la tecnología permite experimentar lo mismo que una pareja humana hace sentir, “¿para qué necesitarías a otra persona en primer lugar?”.
Gawdat sostuvo que incluso los aspectos emocionales y mentales de las relaciones se pueden simular de manera artificial mediante señales enviadas al cerebro.
Además, consideró irrelevantes los debates sobre si los bots de IA son realmente conscientes, argumentando que lo importante es si las personas perciben esas ilusiones como reales.
Para Gawdat, la idea de mantener relaciones sexuales con robots físicos frente a participar en experiencias sexuales virtuales impulsadas por la IA persigue el mismo fin y serán adoptadas en el futuro.
“Si podemos convencerte de que este robot sexual está vivo o que la experiencia sexual en un casco de realidad virtual o un casco de realidad aumentada está viva, es real, entonces ahí lo tienes”, afirmó el autor.
Sexo, dinero y tecnología
El ex ejecutivo de Google también comentó sobre cómo la mera oferta de este tipo de robots o experiencias podría constituir un negocio significativo y lucrativo en el futuro, dado que los usuarios pueden configurar y personalizar estas máquinas del futuro a su gusto.
“Esto representa un rediseño muy importante de la sociedad, un cambio significativo en el concepto del amor y las relaciones, porque hay dinero de por medio”, indicó Gawdat. Destacó que hay muchas personas dispuestas a “salir” con avatares a través de aplicaciones como Replika, en lugar de con una persona real.
Tecnología en el sexo, una realidad
Hoy en día, es más común hablar de juguetes sexuales ya que el tabú que rodeaba a estos dispositivos poco a poco ha ido desapareciendo.
Esta ola de popularidad combinada con recientes avances tecnológicos ha hecho que incluso existan juguetes sexuales inteligentes, los cuales son dispositivos como vibradores, estimuladores, y otros artículos íntimos, que se caracterizan por su capacidad para conectarse a internet, aplicaciones móviles, y otros dispositivos electrónicos.
En este contexto, ha surgido un nuevo término que busca combinar la integración de la tecnología en el placer sexual: sexnología.
La Fundación del Español Urgente, promovida por la Agencia EFE y la RAE, señala que la palabra sexnología, formada a partir de “sexo” y “tecnología”, es válida en español.
El término se refiere a dispositivos inteligentes diseñados para la estimulación sexual, así como ocurre en los aparatos electrónicos señalados anteriormente.
La sexnología incluye plataformas educativas destinadas a promover una mayor comprensión de la sexualidad. También investiga el impacto de la realidad virtual y la inteligencia artificial en la exploración de nuevas formas de intimidad, buscando continuamente maneras de utilizar la tecnología para mejorar el bienestar sexual y emocional.
Llevar la tecnología al ámbito sexual implica la integración de dispositivos, aplicaciones y plataformas digitales diseñadas para enriquecer la experiencia sexual de las personas.