Tiros al aire y un fusil en exhibición: la historia detrás del video de la demostración de poder de la barra de Laferrere
El micro escolar avanza por el asfalto. No lleva estudiantes sino graduados en la peor materia de la Universidad de la Calle: actividades delictivas. ¿Quiénes son? Los 50 integrantes más poderosos de la facción kilómetro 24 de Familia Villera, el grupo que domina la tribuna de Deportivo Laferrere. Que en la previa al partido con Deportivo Armenio decidió ir a la cancha haciendo una demostración de fuerza: no sólo había cantos amenazantes para sus rivales internos, sino directamente tiros al aire y en una imagen surrealista, uno de los barras sacó un fusil por la puerta para que vean que estaban decididos a todo. Si no tuvieran la identificación de los colores del club, se podría pensar que el video reproducía una historia que transcurría en México, Ecuador o los peores momentos de Colombia. Pero no: según confirmó a Infobae la Agencia de Prevención de la Violencia en el Deporte, esto pasó el sábado en La Matanza. Hay una causa judicial abierta (tomó intervención el doctor Fernando Garate, de la Unidad de Instrucción y Juicio N° 1 Descentralizada) y una investigación de por qué ninguno de los policías afectados al operativo logró reportar esta situación increíble.
Para entender lo que ocurre en el vídeo hay que situarse en lo que pasa hoy en la barra de uno de los equipos más populares del Oeste bonaerense. Quienes dominan hoy la popular se hacen llamar Familia Villera y accedieron al poder en 2018, cuando cayeron presos por narcotráfico sus predecesores, llamados La 79. Los nuevos jefes tenían como líder a Fabricio Martínez, un hombre ligado al sindicato de la carne y que algunos también relacionaban a Nicolás Guimil, alias Chaki Chan, el famoso narco que recaudaba 10 millones de pesos por día y que por su idolatría hacia Pablo Escobar era considerado el Patrón de la Matanza.
Tomar la barra tras la caída de La 79 no tenía por objetivo solamente alentar al club que hoy juega en Primera B, sino conseguir la compleja red de comercialización en toda la zona. Para dimensionar lo que estamos hablando, son 42 barrios que responden a quien sea el jefe. Y Chaki Chan después de conquistar Ciudad Evita, Villegas y alrededores, supo que ese era el lugar para extenderse y la barra de Laferrere el vehículo perfecto para acumular poder.
Pero pasaron dos cosas: primero, en una interna que para la Justicia fue tema narco aunque nunca pudo poner a nadie preso, Fabricio Martínez fue acribillado a la salida de su casa. Si bien salvó la vida, supo que debía correrse de un lugar tan expuesto como la tribuna. Algunos aseguran que lo atacó propia tropa de Chan, por diferencias “conceptuales”. Ahí el líder narco puso como jefe en la barra a su mano derecha, Freddy. De hecho, durante todo el año pasado se podía ver debajo de la bandera que decía Familia Villera, otra insignia que decía “La barra de Freddy”. Pero Chan cayó preso casi al mismo tiempo en que empezaron a salir para fines de 2023 los miembros de La 79, tras haber pasado cinco años tras las rejas.
Entonces, los viejos líderes vieron la posibilidad de regresar. Tiki, el ex jefe, empezó a reunir a los que habían quedado fuera con la nueva conducción y hasta a tentar a barras de otros equipos. No sólo por el negocio de cancha, que en Laferrere no deja de ser importante porque lleva muchísima gente y más este año que ascendió a la B, sino fundamentalmente por el narcomenudeo y hasta el manejo de planes sociales.
Así, a comienzos de 2024, empezó una guerra de guerrillas. Freddy desapareció de la cancha desde el comienzo del torneo y nadie sabe su paradero. A su sucesor, el Moski, La 79 le baleó la casa y también lo puso en guardia. Y ahí, el grupo de kilómetro 24 siempre considerado “el gatillero” de la barra, decidió que con ellos no iban a poder. Y para dejarlo claro armaron la escena que se vivió el sábado en los alrededores del estadio. Lo hicieron mientras la Policía miraba para otro lado (todos apuntan a un poderoso de la bonaerense de la zona con apellido que empieza con M) y para muchos, con el aval de la dirigencia del club que les otorga los tickets y otras vituallas. Y por eso la sensación de impunidad que se respira en el vídeo.
La de Laferrere es una barra tan politizada que algunos jugaron fuerte en la interna del PJ (Fernando Espinoza siempre estuvo más cerca del club Almirante Brown y Patricía Cubría de Laferrere), y otros para La Libertad Avanza. Entre estos últimos estaría, según dicen en la tribuna, el ex jefe, Fabricio Martínez. Estas relaciones son históricas: desde mediados de los 90 y hasta 2013, la barra fue gobernada por la facción La Banda Eterna, que lideraban Miguel Balladar y Héctor Roy Pastrana. Por entonces, la barra de Lafe tenía dos negocios: trabajar para Lafer Bus, la empresa que con 35 combis hacía el recorrido hasta el centro, y cobrar por seguridad a los negocios de la avenida Luro, la principal de Laferrere. Todo bajo el paraguas de la protección política. Pero en 2014, un nuevo grupo que reunió a los violentos de los barrios San Carlos, La Marconi, Spiro, Giardino y KM 24 y 26 de la Ruta 3, ganó la tribuna y decidió ampliar el rubro hacia la venta de estupefacientes y el robo a mano armada y tarifar las pintadas políticas en todo su territorio. Para eso trabaron relación con la barra brava de Atlético Medellín de Colombia que pasó a ser la proveedora de la droga que se distribuía en Laferrere, Esteban Echeverría, Virrey del Pino, González Catán e Isidro Casanova. De hecho hubo una redada en 2015 y una causa por narcotráfico que en 2018 barrió con parte de la primera línea, entre ellos el jefe, el Negro Toledo.
Ahí empezó a pisar fuerte Fabricio Martínez, cuyos contactos no eran menores. Porque a diferencia de los anteriores líderes, Martínez venía de tener fuerzas de choque en la zona de La Salada y en el sindicato de la carne de la Matanza, siempre apoyando al secretario general a nivel nacional, José Beto Fantini. A él se le unieron la gente de Km 24 y Km 26. Pero ahora la rueda vuelve a girar. Y los que salieron presos quieren su botín de regreso. Por eso los tiros volvieron al barrio y a los alrededores de la cancha. Laferrere vuelve a jugar este sábado en su estadio. Será contra Liniers. Y los graduados en delincuencia piensan hacer su maestría. Ojalá la Policía actué y los boche porque, sino, las cosas se van a poner más feas que en la actualidad.