Qué hacer si no tengo más espacio de almacenamiento en mi correo de Outlook
Llegar al límite de almacenamiento de Outlook, antes Hotmail, es un problema por varios motivos, principalmente porque el envío de correos sea casi imposible. Sin embargo, existe una solución para a toda esta situación, sin tener que pagar una suscripción.
Al igual que otras plataformas, el servicio de correo de Microsoft cuenta con un tope de espacio de almacenamiento al que se llega con el paso de los años, especialmente si no se borran los contenidos recibidos y se hace uso constante de esta aplicación.
El límite de Outlook es de 15 GB para aquellos que hacen uso del servicio de manera gratuita. Además, la cuenta también tiene acceso a otros 5 GB en la nube, para guardar contenido como archivos y fotos en OneDrive, los correos y las aplicaciones de Microsoft 365.
En caso de llegar a este tope, la plataforma seguirá permitiendo que los correos entren a la bandeja, pero no será posible leerlos o gestionarlos. Además, tampoco se podrán enviar mensajes, ya que la aplicación necesita espacio para hacer el proceso.
Cómo seguir usando Outlook para recibir correos
La solución más efectiva para acabar con todo este problema es pagar la suscripción de Microsoft 365, que amplía el espacio y da otros beneficios. Pero si no creemos que eso sea necesario y no queremos pagar, hay un truco que permite seguir recibiendo los correos y además poder leerlos no normalidad.
La solución consiste en reenviar los mensajes que nos llegan a una segunda cuenta, desde donde será posible leerlos y gestionarlos. Estos son los pasos a seguir:
- Ir a Outlook.
- Dirigirse a la Configuración de tu cuenta.
- Seleccionar la opción Correo y luego Reenvío.
- Elegir la opción Habilitar reenvío.
- Allí tendremos que ingresar la dirección de correo electrónico a la que deseamos redirigir los mensajes. Lo ideal es usar una cuenta nueva o una que tenga poco espacio de almacenamiento ocupado.
Después de eso quedará listo el proceso y ahora todos los correos que lleguen a la cuenta original, serán dirigidos al perfil secundario, desde donde será posible leer los contenidos y contestar los mensajes si es necesario.
Sin embargo, en caso de querer enviar un correo desde la cuenta original, que está con el espacio de almacenamiento lleno, ya no será posible y será necesario pensar en otra alternativa, como cambiar de cuenta, pagar la suscripción o hacer un arduo proceso de eliminación de contenido para liberar almacenamiento.
Para eso lo mejor es empezar a borrar todos los correos que no son necesarios, vaciar la bandeja de correos no deseados, descargar los archivos grandes y borrarlos de la plataforma. Este puede ser un proceso largo, pero es la mejor solución para tener una cuenta libre y que sea posible usarla.
En caso de elegir la suscripción de Microsoft 365, los usuarios podrán ampliar su espacio a 1 TB, además de otros beneficios como acceso a las aplicaciones de Office (Word, Excel, PowerPoint), mejoras en seguridad y usar el correo sin anuncios.
Alerta en Outlook por un malware
Investigadores de Check Point Research han identificado una falla crítica en Microsoft Outlook, que tendría que ver con los hipervínculos dentro de un e-mail. Este problema se encuentra en cómo la plataforma maneja ciertos enlaces que parecen normales pero están alterados.
Cuando un enlace en Outlook usa el modo “file://”, que es una manera de decirle al computador que abra un archivo que está en el sistema, y se le añade una dirección específica con un signo de exclamación y algunos caracteres extraños, ocurre lo siguiente:
Normalmente, si un enlace parece raro o inseguro, Outlook avisa con una alerta o directamente no deja abrirlo. Pero con estos enlaces alterados, esa protección falla. Si el usuario hace clic en uno de estos enlaces malintencionados que parece inofensivo, sin darse cuenta, su computador se conecta a otro computador en alguna parte del mundo controlado por alguien con malas intenciones.
Aquí surge un doble problema. Primero, hay riesgo de que se roben datos importantes del usuario, como sus claves de acceso. Segundo, estos enlaces pueden hacer que se ejecute un código, es decir, que el computador haga cosas que un atacante quiera desde otro lugar.