Los cuarenta nombres más elegidos en Argentina, la incidencia del Mundial entre los varones y las modas de los últimos cinco años
Ellas son Isabella. Ellos son Lionel. Los bebés nacidos en 2023 en el territorio argentino tienen una preferencia. La lista de los veinte nombres más frecuentes en las personas recién nacidas es una investigación que cada año emprende el Registro Nacional de las Personas (Renaper), a través de la oficina de Dirección Nacional de Población. El último trabajo fue publicado el 28 de diciembre de 2023 y permite establecer comparaciones, tendencias, modas y curvas desde 2019. El propósito es saber cuáles son los nombres propios más usuales de los bebés, una forma de pintar los favoritismos argentinos, de identificar pliegues de la identidad nacional.
Que Lionel haya sido el nombre más utilizado entre los niños no es antojadizo: obedece a un hecho bisagra y obvio. El 18 de diciembre de 2022, Argentina salió campeón del mundo en Qatar y Messi, que se llama Lionel Andrés, alzó la copa que tanto anhelaba. El resto, el después es harto conocido. La Messimanía -si acaso ya no existía- se profundizó. No hacía falta ser un visionario para advertir el furor en los natalicios. 8.695 nuevos argentinos nacieron con el nombre de Lionel en 2023. El año anterior habían sido 4.940, en el puesto número doce del ranking. En 2021, 2020 y 2019 no hay datos. El crecimiento, obra del triunfo en el Mundial, fue exponencial.
Lo evidencia también la incremento brutal del nombre Julián, en honor a Álvarez, el segundo goleador del equipo campeón. En los cuatro años precedentes a 2023, no aparecía entre los veinte primeros. En 2023, nacieron 6.504 Julianes, solo superado por Lionel, Benjamín (8.340 inscripciones) y Mateo (7.719 nacimientos). Estos últimos gobiernan la lista de los nombres de varones más elegidos en los últimos cinco años: tuvo que ganar Argentina un Mundial para que Benjamín y Mateo fuesen desplazados de lo más alto del podio por el nombre de la figura del torneo.
La gesta en Qatar tuvo más incidencia en el listado. Enzo, el nombre de Fernández, la revelación de la Selección y mejor jugador joven del certamen, trepó al sexto lugar con 5.675 portadores, por detrás de Gael, una fija en el top cinco de los últimos cinco años y tercero en 2022. Enzo, como Julián, tampoco había figurado entre los veinte nombres más elegidos desde 2019. Nicolás, el décimo más repetido con 4.127 bebés, tal vez no sea un homenaje a Otamendi o a Tagliafico dado que no bajaba del séptimo puesto en las últimas cuatro clasificaciones, pero coincide con los nombres de los futbolistas que levantaron la copa en Qatar. Son cuatro, entonces, los campeones mundiales que penetraron en el ránking de los nuevos varones argentinos.
Entre las particularidades del registro masculino del Renaper, Benjamín, Mateo y Gael se mantienen entre los cinco más frecuentes durante todo el período estudiado. Los que permanecen en el ranking de los veinte más usuales en los últimos cinco años son Bautista, Valentín, Agustín, Joaquín, Ezequiel, Felipe, Benicio, Gabriel, Noah y Tomás. Juan, Valentino, Ignacio y Bruno cayeron del listado en 2023 y van dos años que Thiago no aparece entre los veinte. Santino solo estuvo en 2019 y Lorenzo en 2020. Liam repitió los últimos tres rankings y Ciro apareció por primera vez en la clasificación de 2023.
Isabella es imbatible entre las nenas. Ocupa el primer lugar desde que el Renaper empezó a realizar este informe. Su curva, de todos modos, viene en franco declive: en 2019 fueron 14.578 las portadoras y en 2023, 8.543. Por su parte, Valentina mantuvo la segunda ubicación en cada relevamiento y Sofía solo perdió el tercer puesto del podio en 2020, cuando la sustituyó Victoria. Victoria es justamente una fija de la clasificación. También perduran en la nómina Jazmín, Martina, Emma, Ámbar, Catalina, Mia, Olivia, Abigail, Alma, Maria, Delfina, Franchesca y Emilia. El caso de Olivia vislumbra una preferencia en aumento: en 2019 ocupaba el puesto onceavo y en 2023 escaló a la cuarta ubicación. En sentido opuesto, Victoria cayó del tercer lugar al noveno en los últimos cuatro años.
El estudio arroja un abanico de singularidades. Francesca solo figura en 2019 pero de fusionarse con Franchesca, el nombre (con y sin “h”) ocuparía un virtual quinto puesto. En la lista de 2019 también se cuela Luz, para luego apagarse. Guadalupe y Lucía figuran en los primeros dos años del relevamiento y ya en 2021 se caen de los veinte más empleados. Pilar solo se trepó al ranking en 2021, Emily en 2022 y Roma en 2023. Aitana, por su parte, gana popularidad y se sostiene desde 2021.
El informe distingue caracteriza también las diferencias de preferencia según el lugar de origen. En quince de las 24 jurisdicciones del país, Isabella es la más elegida entre las recién nacidas y solo en Misiones no aparece entre las tres preferidas. Valentina fue el más frecuente en Corrientes, Formosa, Jujuy, Misiones y Salta. Sofía en Chaco, Chubut y la Ciudad de Buenos Aires. Victoria gana en Santiago del Estero.
El registro de los varones es más variado. Lionel fue el nombre más repetido en nueve de las 24 jurisdicciones argentinas y se encuentra entre los tres más frecuentes en 16. Benjamín ocupa el primer puesto en Córdoba, Corrientes, Entre Ríos, La Rioja, San Juan y San Luis. Julián fue el favorito en Chaco, Jujuy, Mendoza, Salta y Santiago del Estero. Mateo fue el más común en la Ciudad de Buenos Aires y Tucumán; y Gael en Formosa y Misiones.
El estudio oficial -caratulado “Nombres propios de personas nacidas en Argentina a partir de la base del Renaper, entre 2019 y 2023″- toma los nombres inscriptos por los progenitores sin discriminar el orden: es decir, atañe tanto al primer como al segundo nombre del recién nacido. Las preferencias cambian radicalmente si el listado se concentra en el primer nombre inscripto: en ese caso, el más elegido en mujeres es Olivia y en varones, Felipe. Según información del ente gubernamental dependiente del Ministerio del Interior, en 2023 se registraron 552.664 nacimientos en el territorio nacional: 283.050 (el 51,21 por ciento) fueron niños y 269.614 (el 48,79 por ciento restante) fueron niñas. Nacieron más varones pero el abanico de nombres es más reducido en comparación a las mujeres: 108.781 nombres distintos registraron ellas y 89.954 se repartieron ellos.