Caen los bonos argentinos pero no evitan que el riesgo país retroceda cerca de mínimos de cuatro años
Los activos bursátiles argentinos operaban mayormente en rojo el miércoles en medio de tensiones políticas que acaparan la atención de los inversores, en momentos en que indicadores inflacionarios muestran una marcada desaceleración. Pese a ello, el riesgo país aún opera en la zona de los 1.200 puntos, su nivel más bajo en casi cuatro años.
A las 15 horas, los bonos nominados en dólares extienden la pérdida de ganancias de la sesión anterior y caen hasta 2,5%. La caída en los títulos argentinos es contrarrestada por una suba de los rendimientos en los EEUU por lo que el riesgo país que mide JP Morgan avanza 40 unidades para la Argentina, hasta los 1.215 puntos básicos.
Los bonos en moneda dura que más ceden son el GD38D (-2,5%); GD29D (-2,4%); y el AE38D (-2,3%). En tanto, la suba es para el GD46D (4,9%) y para el CO26D (1,2%).
El Gobierno de Javier Milei enfrentó en el miercoles una multitudinaria marcha en contra de recortes a las universidades implementados para sanear las cuentas públicas.
“El foco de atención se mantendrá en el plano político, mientras se desarrolla el tratamiento legislativo del paquete fiscal, y el oficialismo busca consensos en la antesala al envío de la nueva ‘Ley de Bases’ al Congreso”, dijo el agente de compensación y liquidación Puente.
El referencial bursátil S&P Merval de Buenos Aires perdía un 3,3%, en los 1.205.000 puntos, afectado por toma de utilidades cortas, al tiempo que los bonos soberanos en el Mercado Abierto Electrónico (MAE) cedían un 0,3% en su promedio en pesos.
Las acciones de Argentina experimentan este miércoles la segunda sesión seguida con tomas de ganancias, luego de haber alcanzado el lunes sus precios en dólares más altos desde junio de 2018. En el caso de los bonos en dólares, ahora en la zona de los USD 60, se trata de sus mejores precios desde que salieron a cotización en el mercado secundario desde septiembre de 2020, después de la reestructuración soberana con acreedores privados.
El mandatario ultraliberal Javier Milei, que cuenta con un amplio apoyo social según recientes encuestas, apunta al firme crecimiento argentino, la liberación del mercado y a terminar con una elevada inflación.
Una reciente encuesta de expectativas de inflación realizada por la Universidad Torcuato Di Tella mostró para abril una significativa desaceleración, revelando una expectativa para los próximos 12 meses del 98,5% promedio, frente al 123,8% previo.
El vicepresidente del Banco Central, Vladimir Werning, dijo en una presentación en Washington que la entidad espera que la inflación caiga al 9% este mes y al 5,8% en mayo.
“El BCRA no puede acelerar el ‘crawling peg’ por encima de la tasa en pesos sin condicionar la dinámica del MULC (Mercado Único y Libre de Cambios)”, reportó Portfolio Personal Inversiones. Estimó además que “acelerar el ritmo de devaluación a uno similar a la inflación para evitar la profundización de la apreciación cambiaria no es posible sin afectar la acumulación de reservas”.
El economista Gustavo Ber explicó que “los activos domésticos una vez más se presentan más flojos dado que vuelven a inclinarse hacia una corrección -tras la impresionante racha alcista- mientras se analizan las señales políticas y económicas”.
“Ello se debe a que los inversores se encuentran ahora más expectantes de las negociaciones por la Ley Bases, en busca de validar que el gobierno logra aprobaciones legislativas así como mejora la sostenibilidad del superávit financiero que se viene logrando en el primer trimestre. Dichos progresos buscarán complementarse con las señales de desaceleración de la inflación núcleo y la continuidad de la acumulación de reservas dentro del camino que resulta necesario recorrer para ir levantando el cepo”, refirió el titular del Estudio Ber.