Despedir a Di María con toda la gloria y los otros dos objetivos por los cuales irá Argentina en la Copa América
Las desventuras y los sinsabores forman parte de un pasado reciente, pero que hoy parece absolutamente pisado. Desde que ganó la Copa América de Brasil 2021 y quebró la racha de 28 años sin títulos a nivel mayores, la Selección Argentina no paró de celebrar. En junio de 2022 le ganó la Finalíssima a Italia por un contundente 3 a 0, en Londres, y a fines de ese año volvió a quedarse con un Mundial, en este caso el de Qatar, luego de 36 años. El conjunto albiceleste llega entonces como el máximo favorito a quedarse con la Copa América que comenzará este jueves en Estados Unidos. El estreno tendrá como protagonistas a los campeones del mundo, que debutarán ante Canadá en la ciudad de Atlanta a partir de las 21 de la Argentina.
La Selección tendrá tres objetivos salientes en la Copa América. En la intimidad del plantel, los futbolistas se propusieron que la despedida de Ángel Di María sea con una nueva vuelta olímpica. “Fideo” ya anunció que la Copa América marcará su despedida del seleccionado argentino y el grupo le quiere regalar otra gran alegría para que su último baile sea con todos los honores. Goleador del equipo en las finales del Maracaná, de Wembley y del Lusail Stadium, Di María es uno de los tres históricos del equipo junto a Lionel Messi y Nicolás Otamendi, con quienes tiene una ya larga amistad.
Di María ganó cinco títulos vestido de celeste y blanco: tres con la Mayor (Copa América 2021, Finalíssima 2022 y Mundial de Qatar 2022), uno con el seleccionado Sub-20 (en el Mundial de Canadá 2007) y una medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Beijing 2008. En la final de esos Juegos Olímpicos, Di María también anotó el gol de la victoria de Argentina, por 1 a 0 ante Nigeria, luego de una asistencia de Messi. De manera que “Fideo” -hombre de partidos trascendentales si los hay- anotó goles en cuatro de las cinco finales que jugó para los distintos seleccionados argentinos.
Otra búsqueda de la Selección en los Estados Unidos será la de quedar como el máximo ganador de la Copa América en la historia. Hoy, Argentina y Uruguay son los que más festejaron con quince títulos cada uno, mientras que Brasil está tercero por haber ganado nueve veces esta competencia. Paraguay, Chile y Perú salieron campeones en dos ocasiones, mientras que Colombia y Bolivia levantaron una Copa América cada uno.
El tercer objetivo es el que se planteó el cuerpo técnico que comanda Lionel Scaloni, un entrenador híper exigente que no quiere que sus futbolistas se relajen tras ganar la Copa del Mundo. Lejos de eso, cuando el técnico puso en duda su continuidad luego de la victoria del 21 de noviembre del año pasado ante Brasil, por 1 a 0 en el Maracaná con un cabezazo de Otamendi, lo hizo porque -entre otras cosas- quería tener en claro que el espíritu competitivo del equipo se mantenía tan alto como siempre.
Scaloni pretende que el seleccionado siga con esa mentalidad ganadora que lo caracteriza, con Messi como bandera y un plantel repleto de jerarquía y con una fuerte competencia interna. Más allá de la incomodidad que siempre representa eso para los entrenadores, a Scaloni le gusta mucho que los jugadores le pongan complicada la elección de los intérpretes titulares. Y más allá de que la base inicial está clara (“Dibu” Martínez, Cristian Romero, Otamendi, Rodrigo De Paul, Alexis Mac Allister, Messi y Di María parecen ser una fija del once ideal), todos saben que si bajan la guardia tienen detrás jugadores de idéntica calidad esperando por un lugar de entrada.
En su búsqueda de que el equipo siga teniendo un funcionamiento aceitado y confiable, Scaloni no quiere que haya espacios para descuidos o desajustes como los que el equipo mostró en el primer cuarto de hora del amistoso que el viernes le ganó por un contundente 4 a 1 a Guatemala, en Washington, en el cierre de la preparación para la Copa América. Sabe que son cuestiones que pueden ocurrir en medio de un partido, pero aspira a achicar lo máximo posible los márgenes de error durante el desarrollo de los encuentros.
Argentina jugará el próximo jueves, ante Canadá en Atlanta, el partido inaugural de la Copa América. Tras ese encuentro, los campeones del mundo se medirán contra Chile el martes 25 en el MetLife Stadium de New Jersey, por la segunda fecha del Grupo A. El cierre de la fase de grupos será ante Perú, el sábado 29 en el Hard Rock Stadium de Miami. La final, esa a la que le apunta Argentina para despedir a Di María con otra vuelta olímpica, para alimentar la grandeza del fútbol de los campeones del mundo y para cumplir con la búsqueda de Scaloni, también se jugará en Miami, el domingo 14 de julio.