Entusiasmo, fe y música durante las primeras horas de la caminata a Luján: esperan más de un millón de fieles
Una nueva edición de la Peregrinación Juvenil a Luján está en marcha, es la número 50, en otra demostración de fe y oración que atraviesa al país, organizada por la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular del Arzobispado de Buenos Aires.
Bajo el lema ”Madre, bajo tu mirada buscamos la unidad”, miles de jóvenes marchan en una caminata multitudinaria de aproximadamente 63 kilómetros hacia la Basílica de Luján, un trayecto que demandará unas 15 horas y recorrerá los municipios de Morón, Merlo, Moreno y General Rodríguez, siguiendo la Ruta Nacional N°7. Se esperan más de un millón de fieles.
Peregrinos de todo el país se encolumnan a la vera de la vía de la línea del Tren Sarmiento para desandar la distancia que los separa de la Virgen. “Venimos del Colegio Luján, de la capital de San Juan, es mi primera vez en la peregrinación, espero poder llegar pero ya estar acá es un montón. Vengo para agradecer a la Virgencita por todo lo que nos da y pedirle también por las intenciones que traemos desde San Juan. De vuelta volvemos todos durmiendo”, dijo un joven a Crónica TV mientras se oía la música de fondo y las arengas para continuar la marcha.
Bendiciones de los curas que se acercan a los fieles, caminatas grupales, momentos para mirar al cielo y agradecer por decir presente una vez más en la emotiva e histórica procesión que tuvo como punto de inicio el Santuario de San Cayetano de Liniers -ubicado en Cuzco 150- junto a la Imagen Peregrina que acompaña la marcha.
Muchas banderas argentinas, mochilas con provisiones y el grito de “¡Viva la Virgen!” que arenga a cada uno que, con más o menos limitaciones físicas, avanzan paso a paso movilizados por la fe. Cada uno a su ritmo, no hay apuro, motoriza la pasión religiosa, que incluye para muchos una rigurosa preparación física, año a año. Y el que no llega a pie hacia la Basílica, se sube a uno de los colectivos que lo acercó al punto de partida, en dirección a Luján.
Una de las participantes más famosas es Carolina “Pampita” Ardohain quien participó una vez más de la masiva procesión. Ella es muy devota de la Virgen de Luján y, según contó tiempo atrás, fue a la Basílica a pedir quedar nuevamente embarazada. Luego regresó para agradecer por la vida de su bebé Ana, la hija que tuvo con Roberto García Moritán, de quien se separó recientemente.
Una abuela con su nieto, provenientes de Puerto Madryn, se aúnan en un pedido a la Virgen: “salud para todos”, como así también otra peregrina, oriunda de Entre Ríos, agrega el factor “trabajo”. Una mañana calurosa, bajo pleno rayo de sol, no es excusa para claudicar, el incesante trajinar de los fieles -entre los que se destacan varios boy scouts que solo agradecen lo que les da la Virgen- es parte del colorido que comienza a caminar por Liniers, Ciudadela y Ramos Mejía, camino a Luján.
Por otro lado, poco antes del inicio de la procesión, el arzobispo de Buenos Aires, Jorge García Cuerva, aseguró que el “tenemos que revertir esto entre todos y qué mejor que pedirle a la Madre -en relación a la Virgen-, que nos haga tomar conciencia que somos hijos y hermanos”, opinó en declaraciones a Todo Noticias.
Durante la noche de hoy, se encenderán velas a lo largo del camino para iluminar el paso de los peregrinos y crear un ambiente de recogimiento y oración. Mientras tanto, los fieles que arriban a destino podrán participar de misas que se realizan durante hoy y mañana en la plaza Belgrano de Luján, frente a la Basílica.
Este sábado hay programados oficios religiosos para las 15, 16, 17, 18 (rezo del Rosario y animación de los peregrinos), 19, 20:30, 22 y 23:30. Durante la jornada del domingo serán a la 1, 2:30, 3:15 (otra animación), 4, 5:30 y 7. Esta última estará presidida por el arzobispo de Buenos Aires, monseñor Jorge García Cuerva, junto a monseñor Jorge Eduardo Scheinig y numerosos obispos. Además habrá una serie de misas que se realizarán en el interior de la Basílica: a las 9:30, 11, 13, 15, 17 y 19.
Este evento anual pone a prueba una vez más la manifestación de fe y devoción que une a la comunidad católica en busca de consuelo y bendiciones, ya que la peregrinación a Luján es una tradición profundamente arraigada. Durante este masivo evento se lleva a cabo un gesto simbólico que une el pasado y el presente de la peregrinación ya que este domingo se entregará a la Virgen de Luján un cuadro que contiene los afiches de la primera y de esta 50ª edición de la peregrinación. Además, se leerá una oración especial, que representa el fruto de todos estos años de fe.
Por otro lado, la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular invita de manera especial a todos aquellos que participaron en las primeras marchas de fe a sumarse a esta celebración, remarcando la importancia del legado del Padre Rafael Tello, iniciador de la peregrinación, y el compromiso de tantos sacerdotes que a lo largo de cinco décadas han acompañado y trabajado en esta manifestación de devoción popular.
La canción que acompañará esta edición especial es Bajo tu mirada de Alfo Urrutia, un componente obligado sobre todo cuando los rayos de sol se comiencen a esconder en el horizonte y la noche atrape a los peregrinos en plena caminata, estén donde estén. Bomberos provenientes de O´Higgins, grupos de personas que cargan sus estatuas de la Virgen, los experimentados (”es mi marcha número 23″) y hasta nombres de la política, como Guillermo Moreno, el ex Secretario de Comercio, dijeron presente en la procesión. “En cada parada me vas a ver, vamos a llegar a Luján”, prometió el ex funcionario kirchnerista, a Crónica TV, mientras saludaba a todo aquel que le estrechaba la mano.
Puestos sanitarios y transmisión en vivo
Como cada año, la Comisión Arquidiocesana de Piedad Popular preparó un dispositivo especial para garantizar la seguridad y bienestar de los peregrinos. A lo largo del recorrido, hay más de 60 puestos sanitarios y de apoyo, distribuidos estratégicamente para asistir de forma gratuita a todos los caminantes. Estos puntos de atención tienen como objetivo brindar confianza, ánimo y protección a las miles de personas que se dirigen hacia la Basílica de Luján.
También AySA, la empresa de aguas y saneamiento, participa una vez más en esta edición especial con un operativo de asistencia para proveer de agua potable a todos los peregrinos. La empresa dispone de 12 camiones cisterna distribuidos a lo largo del recorrido. La empresa recomienda a todos los fieles a llevar su propia botella para recargarla en los puntos de hidratación, promoviendo así la reducción del consumo de plásticos y el cuidado del medioambiente.
Para quienes no puedan asistir físicamente, la peregrinación ya se puede seguir de manera virtual a través de las redes sociales oficiales (@laperelujan) y en vivo por el canal de YouTube. La transmisión, a través del canal de Instagram @laperelujan, se extenderá hasta la 1:00 de la madrugada del domingo, permitiendo a todos los devotos unirse a la celebración desde cualquier lugar.
La primera peregrinación juvenil ocurrió en 1975 y, durante esta última edición, se rinde homenaje a este histórico camino de fe que atravesó cinco décadas y une a varias generaciones de argentinos. Desde su creación, se caracterizó por su espíritu de fraternidad, esperanza y oración por el país.
Los organizadores actuales explican que se trata de “peregrinos que caminamos en la continuidad histórica del Pueblo de Dios en la Argentina, entre los gozos y las esperanzas, las tristezas y las angustias de nuestra Patria”. Y agregan: “Los que peregrinamos en 1975 nos hermanamos a los que hoy participan de la 50ª Peregrinación Juvenil a Luján, movidos por el mismo amor a Jesús y a la Virgen, Madre de los argentinos”.
El primer lema de la peregrinación fue ”La juventud peregrina a Luján por la Patria”, y medio siglo después, el lema actual refleja un deseo de unidad: ”Madre, bajo tu mirada buscamos la unidad”. Los organizadores destacan la importancia de este diálogo intergeneracional, ya que a pesar de las diferencias de los años y circunstancias, la devoción a la Virgen de Luján sigue uniendo a jóvenes y adultos en una plegaria mancomunada por el país.