Liberaron a “El Pepo” por el accidente en el que causó dos muertes
Rubén Castiñeiras, el popular cantante de cumbia villera conocido como “El Pepo”, fue excarcelado este lunes por decisión de la Justicia luego de haber sido condenado por el accidente en el que murieron dos de sus músicos en julio de 2019, según confirmó a Infobae su abogado, Marino Cid. “Quedó libre desde las 12 del mediodía de hoy”, confirmó el letrado: “Su condena se considera cumplida”.
“El Pepo”, que pasó los últimos años bajo prisión domiciliaria en su casa de Santos Lugares, había sido condenado a fines de diciembre de 2022 en un juicio abreviado en el Juzgado en lo Correccional Nº 3 de Dolores: recibió la pena de 4 años y siete meses de cárcel. También, se le impuso hacer un tratamiento psiquiátrico y psicológico y la prohibición de manejar por una década.
El acuerdo por el juicio abreviado terminó con el músico aceptando el cargo de homicidio culposo séxtuplemente agravado por conducción imprudente, negligente y antirreglamentaria, bajo los efectos de estupefacientes y con un dosaje de 1,02 gramos de alcohol por litro de sangre, por exceso de velocidad, por mediar culpa temeraria y por la pluralidad de víctimas y lesiones culposas agravadas. Sus víctimas fueron Nicolás Carabajal e Ignacio Abosaleh.
La decisión de excarcelarlo bajo caución juratoria, que se hará efectiva desde la Comisaría 3ª de Tres de Febrero, fue tomada por el mismo juzgado que lo condenó, a cargo del magistrado Eduardo Adrián Campos. Hasta este lunes, el músico era monitoreado con pulsera electrónica.
El accidente
El músico recibió la pena a prisión por la muerte del trompetista de su banda (Carabajal) y de su asistente (Abosaleh). Ambos viajaban en el asiento trasero de la camioneta Honda CRV que conducía el cantante la noche del 20 de julio de 2019 en la ruta 63, en Dolores, cuando volcó. Iban camino a Villa Gesell para un recital y además viajaba, en el lugar del acompañante, la bailarina Romina Candia, quien resultó herida. Ella también debió ser internada, aunque fuera de peligro.
Tras pasar diez días en el Hospital Municipal San Roque de Dolores, Castiñeiras recibió el alta médica y fue alojado en la Comisaría N° 1 de Chascomús. Luego, lo trasladaron a la Alcaidía N° 3 de Melchor Romero, en La Plata. Allí sufrió un accidente mientras jugaba al fútbol: se fracturó una pierna y, tras ser operado, le concedieron el beneficio del arresto domiciliario. En esa condición siguió adelante con su carrera y grabó nuevas canciones.
Abosaleh, que había sido bombero voluntario, era papá de Ian, hoy de 10 años. “Él es hermoso, el vivo retrato de su papá. Le mostré fotos de su papá chiquito y me dijo que eran iguales, va creciendo y se parece cada vez más. Tiene la personalidad fuerte que tenía mi hijo, se enoja como él, come las mismas cosas, dejó de comer cosas que comía con su papá, lo dejó guardado en su corazón”, había contado su mamá, Patricia Achu, en una entrevista con este medio.
Carabajal era papá de Alma, de un año y medio en ese entonces, y estaba esperando a Mateo, que nació dos meses después de su partida. Hace un tiempo Romina, su esposa, se mostró desilusionada: “El pedido de Justicia sigue ahí en la nada, yo ya perdí las esperanzas, en este país la seguridad vial es una vergüenza, no está en ninguna agenda política. Seguimos sin fecha de juicio, nada avanzo, el homicida vial goza de salidas laborales, además de todas las salidas por médicos que tiene, que son muchísimas, todo dudoso, nadie controla nada”.