Un policía de la Bonaerense alcoholizado chocó contra un poste de luz e intentó golpear a los agentes de la guardia urbana: fue detenido
Un oficial de 22 años de la Policía Bonaerense, identificado como I.N.G.S., fue detenido esta madrugada luego de protagonizar una violenta secuencia en La Plata: primero chocó contra una columna de alumbrado público; luego, se bajó del vehículo y, en estado de ebriedad, intentó golpear a los agentes de la guardia urbana municipal que se acercaron a asistirlo, indicaron fuentes del caso a Infobae.
El episodio ocurrió en la Plaza Güemes, ubicada en la calle 19, esquina 38, donde el policía, que presta servicios en el destacamento Villa Progreso, de la localidad de Berisso, además de impactar contra el poste de luz, embistió un cantero de ladrillos a la vista. El auto que conducía, un Ford Fiesta Max, en tanto, quedó con el frente destruido producto del fuerte golpe.
Visiblemente borracho, el oficial de la Bonaerense se bajó del vehículo y se mostró violento hacia los efectivos de la guardia urbana, con quienes intentó tomarse a golpes de puño.
Sin embargo, fue reducido. De acuerdo a las fuentes consultadas por este medio, los uniformados notaron que el conductor se encontraba alterado, verborrágico y tenía un fuerte aliento etílico. Al mismo tiempo, se negó a dar sus datos personales.
El oficial fue aprehendido en ese momento y trasladado a la comisaría platense, donde fue identificado como personal policial. En el lugar, se hizo presente personal de la Dirección de Tránsito de La Plata, que llevó a cabo test de alcoholemia, que arrojó resultado positivo con un algoritmo de 1,50 gramos de alcohol por litro de sangre, precisaron.
Hay que recordar que en territorio bonaerense rige la Ley Alcohol Cero.
Tras una comunicación telefónica, la UFIJ N°2 de turno dispuso constatar su identidad y, luego, que el policía recupere su libertad.
“¡Sí, estoy borracho!”
El episodio recuerda al caso de un comisario de la misma fuerza de seguridad que, en mayo de 2022, fue arrestado por conducir ebrio en Banfield, en el partido de Lomas de Zamora. Fuentes policiales informaron al medio Data Conurbano que, debido al escándalo protagonizado en el cruce de las calles Larroque y San Martín, Oscar Alberto Alonso fue desafectado de su cargo y quedó bajo investigación administrativa de la Auditoría de Asuntos Internos de la fuerza, división que podría resolver su expulsión definitiva de la Bonaerense.
“Capitán, ¿qué me agarraste del auto? Tengo 11 años de subcomisario y cuatro de comisario”, se escuchó decir a Alonso en uno de los videos que circularon por entonces por las redes sociales, evidenciando su complejo estado como para manejar en la vía pública. Y en tono desafiante, continuó: “¡Capitán! ¿Cómo es tu nombre capitán? Yo soy el comisario Alonso y estoy borracho. Sí, estoy borracho, mirá… Y estoy desarmado”.
Durante su intento por convencer a los agentes presentes para que no reportaran su detención, Alonso, quien se desempeñaba como jefe de turno en la seccional 8ª de Lomas de Zamora -Villa Galicia-, solicitó en reiteradas oportunidades que le entregaran su teléfono celular, algo que finalmente no ocurrió.
“Yo nunca me puse en contra de un azul”, aseguró luego el conductor demorado, mientras era retenido por algunos colegas que, mientras tanto, debatían qué hacer con Alonso. Firme en su postura por resistirse al arresto, les dijo en tono provocador: “Capitán, ¿me querés llevar preso? Poneme las esposas”.
Finalmente, fue trasladado a la comisaría de Banfield, donde, al llegar, se negó a descender del móvil y acusó signos de dolor por las esposas en sus manos. Una vez en la dependencia policial, se constató su identidad, su domicilio y su situación dentro de la fuerza, además de proceder al secuestro del arma reglamentaria que llevaba consigo.